Mauri y Koldo Aguirre reciben sus brazaletes

El Athletic Club ha entregado a Mauricio Ugartemendia (1934) y Koldo Aguirre (1939) este mediodía en Ibaigane los dos brazaletes de homenaje que les correspondían como integrantes vivos del equipo que disputó la memorable final de Copa de 1958, la mítica de los “once aldeanos”. Carmelo, Etura y Uribe ya recogieron el pasado 10 de abril sus respectivos brazaletes originales y únicos reconvertidos en obsequios, pero aquel día ni Mauri ni Koldo Aguirre pudieron asistir a Lezama. Sus compañeros Jose Mari Argoitia y José Ángel Iribar, con quienes compartieron equipo en la década de los 60, recogieron los brazaletes en su nombre y hoy han sido los encargados de entregárselos en mano. Asimismo, al acto ha asistido el presidente, Aitor Elizegi, quien ha aprovechado la señalada ocasión para homenajear a los propios Iribar y Argoitia con sendos brazaletes en señal de agradecimiento y homenaje.

En la fotografía oficial a pie de campo de aquel equipo que conquistó Chamartín, figuraban, inmortalizados en la imagen, quince representantes del Club: Guillermo (masajista), Carmelo, Orue, Garay, Canito, Mauri, Etura, López (portero suplente), Baltasar Albéniz (entrenador), I. Birichinaga (masajista), Artetxe, Koldo Aguirre, Eneko Arieta, Uribe y Gainza (capitán). De todos ellos, solo sobreviven seis futbolistas, incluyendo al portero suplente Juan Antonio López, que no jugó. El triunfo supuso uno de los hitos más reseñables de la historia del Athletic, considerando que los goles de Arieta y Mauri derrotaron, y en su campo, a un Real Madrid que acababa de ganar la Liga y había conquistado también tres de las cuatro anteriores, amén de las cinco Copas de Europa consecutivas que logró entre 1955 y 1960.