Manolo Delgado Meco, 50 años de vanguardia y pasión rojiblanca

Manolo Delgado Meco, 50 años de vanguardia y pasión rojiblanca

El histórico preparador físico, que acaba de cumplir ochenta años, celebra también las cinco décadas desde su llegada al Athletic Club en agosto de 1975

Atendiendo a la llamada de Piru Gainza y del entonces gerente de la entidad, José Ignacio Zarza, Manolo Delgado Meco estampó su contrato como preparador físico del Athletic Club el 1 de agosto de 1975. Firmó para apenas 10 meses y se convirtió así en un pionero en la entidad. Con apenas 30 años se encargaba de la preparación física del CD Tenerife y meses antes había participado en un gabinete de expertos organizado por la entidad rojiblanca. Dejó la isla y llegó al Athletic, su casa durante las últimas cinco décadas y cuya historia moderna no puede ser contada sin citar a Manolo Delgado Meco.

Nacido el 7 de julio de 1945 en la localidad manchega de Alcázar de San Juan, abrazó de forma temprana la pasión por el fútbol militando, como portero, en las filas del Alcázar CF, las categorías inferiores del Real Madrid CF, el Calvo Sotelo de Puertollano CF, Manchego FC, Boetticher y Navarro y, finalmente, Talavera CF. Paralelamente, Delgado Meco fue uno de los jóvenes que abrió camino en el INEF de la época de la mano de Jose María Cagigal, que ideó un nuevo modelo formativo para el desarrollo de la preparación física. Y es que hasta entonces, dicha disciplina era coto vedado, salvo para militares y falangistas. Desde sus inicios, Delgado Meco rompió moldes.

Licenciado en Educación Física y profesor de la asignatura «Teoría y Práctica del entrenamiento», en 1972 firma con el RCD Mallorca y, poco después, firma con el CD Tenerife. Tras dos campañas en el conjunto isleño, su llegada al Athletic se produjo en un momento de transformación y modernización de la entidad. Prueba de ello fue la puesta en marcha de las instalaciones de Lezama, el desarrollo de una nueva generación de entrenadores encarnada por Koldo Agirre, Iñaki Sáez, Txutxi Aranguren y Javier Clemente, los fichajes de la conocida como «Operación retorno», el desarrollo de los futuros talentos que lograrían los títulos de la década de los ochenta y el situarse en la vanguardia de la preparación física con un novedoso sistema ideado Manolo Delgado Meco. Todo ello, bajo la monitorización de Piru Gainza.

Cambió por completo el modelo del desarrollo físico de los jugadores, buscando junto a Koldo Agirre la fórmula para integrarla con las acciones técnicas. Salidas a las faldas de Gaztelumendi, acondicionamiento de las instalaciones de Lezama, compra de nuevos materiales, ejercicios en los que también participaban los guardametas, sesiones grabadas en antiguas cámaras Súper 8, tiempos registrados en cronómetros y planillas en las que se planificaba toda la preparación de los equipos de Lezama. Un pionero que bebía de las fuentes del «Endurance» francés y que procuraba incorporar toda novedad posible a su repertorio.

Durante sus cinco décadas en el conjunto rojiblanco, ha trabajado con Rafa Iriondo, Koldo Agirre, Helmut Senekowitsch, Iñaki Sáez -en tres etapas-, Javier Clemente -en tres etapas-, Jose Angel Iribar, Howard Kendall, Txetxu Rojo -en dos etapas-, Txutxi Aranguren, Jupp Heynckes -en dos etapas-, Jabo Irureta, Jose Mari Amorrortu -en dos etapas-, Dragoslav Stepanovic, Luis Fernández, Ernesto Valverde, José Luis Mendilibar y Jose Manuel Esnal «Mané». Asimismo, ha ejercido como readaptador y recuperador de jugadores con lesiones de larga duración durante las estancias de Félix Sarriugarte y Joaquín Caparrós en el banquillo rojiblanco y como asesor de la dirección deportiva durante la etapa de Rafa Alkorta. Como preparador físico cuenta con dos títulos de La Liga (1983 y 1984), uno de Copa (1984) y otro de Supercopa (1984), además de ser finalista de la UEFA en 1977. Como miembro de la dirección deportiva, también sumó la Supercopa de 2021. Su figura referencial le llevó a dirigir el trabajo físico de la selección española en los mundiales de 1986, 1990, 1994 y 1998 o las Eurocopas de 1988, 1996 y 2004, trabajando a las órdenes de técnicos como Miguel Muñoz, Luis Suárez, Vicente Miera, Javier Clemente e Iñaki Sáez. Un rol que también ha cumplido en distintas convocatorias de la selección vasca.

Hablar de Manolo Delgado Meco es hablar del Athletic Club y viceversa. Actualmente sigue vinculado a la entidad, ligado a la parte social, manteniendo una gran presencia en eventos y acudiendo de forma habitual a los actos organizados por las peñas rojiblancas. Buena parte de sus tesoros se pueden encontrar en AC Museoa como parte del enorme legado y agradecimiento de un manchego universal enamorado de Euskal Herria. Nombrado hijo predilecto de Alcázar de San Juan en 1990, en un acto en el que participó el primer equipo del Athletic, recibir la medalla de bronce del Consejo Superior de Deportes (CSD) y ser fundador de la Ikastola Betiko de Areeta se encuentran entre los múltiples honores de la biografía de un hombre polifacético que lleva su lema "burua, bihotza eta kemena" por bandera.

Zorionak Manolo, zu zara nagusia!