Osasuna 1 Athletic Club 1: Un pequeño paso

Igualada a un gol la cosechada por el Athletic Club en Iruñea frente a Osasuna, tantos obra de Gabilondo en la primera mitad y de Soldado en la reanudación. Empate que supone un pequeño paso y que reafirma, sobre todo si a los resultados finales nos atenemos, que superar la asignatura pendiente para salir de los puestos delicados de la tabla pasa por obtener victorias en San Mamés.

El Athletic Club ha tenido al alcance de la mano el triunfo, y al final la derrota, en una cancha en la que suele sumar, feudo del cuarto clasificado de la pasada Liga y que se ganó a pulso una plaza para la Liga de Campeones, por aquello de que la memoria histórica es cada vez más escasa y más aún si se trata de ponderar las virtudes del rival.

Un adversario reñido con el gol del que se sabía que su empuje iba a ser prolongado en los primeros minutos, avalancha que el Athletic ha sabido controlar en el primer período con sólo tres remates de cierta enjundia, todos ellos con la testa. Los dos primeros obra de Webo muy desviados y el tercero de Raúl García, por encima del larguero en el minuto 35.

Por nuestra parte Javi Martínez ha hecho trabajar por vez primera a Ricardo en el minuto 18 y a partir de ahí ha ido labrando el terreno para poder adelantarse en el marcador. El robar el balón en zonas comprometidas permitía triangulaciones y aperturas a banda que creaban peligro. En una de éstas el balón ha terminado en la derecha desde donde Etxeberria ha centrado para que Gabilondo, quien ya lo había intentado de volea lejana, rematara de cabeza en plancha para adelantar a los rojiblancos. El Athletic ha seguido peleando en busca del segundo tanto y Yeste ha hecho a lucirse a Ricardo en saque de falta que los rojiblancos han reclamado como gol al entender que el cancerbero la sacaba desde dentro.

La mitad del trabajo estaba hecha, pero quedaba apechugar con la reacción del rival. De entrada Ziganda ha introducido a Soldado en el lugar de Webo y para empezar un defectuoso despeje de Aduriz ha tenido que ser despejado bajo palos por Iraola. Desgraciadamente cuando parecía que, como en la primera mitad, el Athletic se sobreponía al acoso del rival ha llegado el tanto del empate tras jugada de Valdo, rechazar el cuero Sarriegi y rematar a poca distancia Soldado.

El Athletic ha recogido el reto y se ha hecho con la iniciativa del partido, al menos hasta la recta final donde Osasuna ha vuelto a dar el arreón. Aduriz ha rematado fuera por poco a la salida de un corner, Yeste ha puesto a prueba la atención de Ricardo en saque de falta, si bien de nuevo ha sido Gabilondo el que ha combinado, como ocurriera en Copa, dosis de calidad y falta de acierto final. Un sombrero suyo a un defensa, un balón entre las piernas del guardameta que éste ha tocado ligeramente y un defensa, Corrales, que despejaba cerca de la misma raya.

Osasuna esperaba su oportunidad y seguía moviendo piezas para adaptarse a la nueva situación. Milosevic se ha ido a la ducha y la entrada en su lugar de David López ha propiciado que Valdo jugara más entre líneas y a la defensa rojiblanca le fuera más difícil fijar la posición. Para los últimos diez minutos Juanlu ha reemplazado a Delporte. En nuestras filas Urzaiz ha relevado al lesionado Aduriz, Dañobeitia a Etxeberria y en lugar de Yeste ha entrado Beñat Etxebarria, un nuevo debutante, jugador que a comienzos de la pasada campaña militaba en el Baskonia de Tercera División.

El Athletic había intentado todo y aunque perseguía seguir llevando el balón a posiciones de peligro los contragolpes no han tenido la finalización idónea por falta de claridad y Osasuna se ha ido superando para exprimir sus últimas opciones, tanto en número como en tiempo. Han sido tres, un disparo cruzado de David López, un intento de despeje de Urzaiz con la cabeza y un contragolpe en el minuto 92+ por parte de Soldado. En los tres casos la actuación de Lafuente ha evitado males mayores y, de paso, ha espantado el fantasma de que se repitiera la dolorosa derrota de la pasada temporada con gol rival en el período de descuento.

Para finalizar, además del mencionado debut de Beñat, dos detalles. El primero no por sabido digno de ignorar: los seguidores de Osasuna han arropado de manera primorosa a su equipo y, el segundo, la agresividad desde la grada para con nuestros jugadores ha superado episodios conocidos en otros campos más alejados. En ese contexto, es inaceptable que dos petardos sean arrojados contra Iñaki Lafuente cuando éste se encuentra realizando sus ejercicios de calentamiento. Es inaceptable en el Reyno de Navarra o en el Reino de Thailandia. Y, por supuesto, lo sería en San Mamés.