El león forjado en Tolosa y afincado en Laudio

Pasada ya la treintena, el defensa natural de Tolosa y afincado en Laudio, Jose Mari "Txato" Núñez compartió el eje izquierdo de la zaga con Luis De la Fuente y tuvo un papel clave en la Copa conquistada en 1984, siendo el autor del penalti decisivo frente al Real Madrid en semifinales y formando parte del once que derrotó al FC Barcelona en la final.

Nacido el 22 de enero de 1952 en Tolosa, comenzó a destacar en el Urdiña Txiki de su localidad, cuna de otros grandes futbolistas de su generación como Periko Alonso -padre de Xabi y Mikel Alonso- al que le une la procedencia de su apodo. Y es que tras un choque con Periko Alonso, Núñez se rompió la nariz y se ganó el apelativo de “Txato”, que todavía conserva. Tras llegar a Lezama y pasar por el Bilbao Athletic, debutó con el primer equipo el 7 de septiembre de 1974, compartiendo alineación con mitos como Iribar, Carlos o Txetxu Rojo, entre otros. Continuó forjándose durante dos temporadas, en calidad de cedido, en el Sporting de Gijón, para retornar al Athletic Club el verano de 1978, donde se mantuvo hasta 1986. En total, disputó 258 partidos como león, repartidos en 11 campañas, en los que anotó 2 tantos. Posteriormente, fue directivo del Club durante la etapa de José Julián Lertxundi como presidente y ejerció como delegado del primer equipo durante 17 años. 

Cuatro décadas después y con el agradecimiento de haber podido participar en el partido de leyendas celebrado durante la fiesta final del 125 aniversario de la entidad, “Txato” Núñez rememora los éxitos cosechados cuatro décadas atrás, subrayando que son vivencias “que no se pueden expresar con palabras”, y mostrando su deseo y convencimiento de que el equipo actual y las nuevas generaciones también puedan experimentarlas.