FC Barcelona - Athletic Club
Jornada 24
Liga

FC Barcelona - Athletic Club

FC Barcelona
FC Barcelona
21
Athletic Club
Athletic Club
  • 3' Villa
  • 77' Messi
  • Iraola (p.) 49'

UbicaciónCamp Nou , Barcelona

Buen trabajo colectivo, pero vuelta de vacío

FC Barcelona 2 – Athletic Club 1El Athletic Club ha perdido 2-1 ante el FC…

Athletic Club

FC Barcelona 2 – Athletic Club 1


El Athletic Club ha perdido 2-1 ante el FC Barcelona. Iraola, de penalti, ha logrado el gol rojiblanco, mientras que Villa y Messi hacían los del cuadro local. Nuestro equipo ha hecho un buen partido y ha plantado cara al no por archiconocido menos todopoderoso equipo catalán. Pese a todo, el correcto trabajo colectivo y la generosa entrega no han sido suficientes para seguir sumando en pos del objetivo europeo que, curiosamente tras dos derrotas consecutivas, sigue estando ahí, no en vano el Athletic se mantiene en la quinta plaza.

Durante toda la semana, el mensaje enviado desde Lezama ha hecho referencia a que, para poder puntuar en un campo como el Camp Nou, además de hacerlo todo bien, era preciso contar con la fortuna, la buena, como aliada y que los locales no tuvieran su día, amén de no encajar goles con prontitud. Así las cosas, el inicio del encuentro ha sido para echarse a temblar.

Solo habían transcurrido tres minutos de juego cuando Villa ha hecho el primer gol de la noche al recibir un pase atrás de Alves, quien había partido en posición antirreglamentaria. Los más pesimistas auguraban una goleada amplia en contra, pero nuestro equipo no es de aquellos que se arrugan a la primera adversidad y el Barcelona ha tenido que sudar para poder llevarse los tres puntos. Vamos, que a modo de consuelo, la palabra tranquilidad no ha entrado en el vestuario rival hasta el pitido final.

Era cosa sabida que los de Guardiola llevarían la iniciativa, que tendrían el balón casi en propiedad y que iba a ser difícil llegar a los dominios de Pinto. Sin embargo, el Athletic no ha arrojado en ningún momento la toalla y, con su propuesta y en la medida de sus posibilidades, le ha discutido al Barça cada uno de los tres puntos en litigio.

La primera respuesta al tempranero tanto la ha dado Susaeta a centro de Llorente, papeles cambiados, pero su cabezazo en plancha lo ha enviado el sustituto de Valdés a córner en el minuto 11. No lo ha visto así el colegiado, mientras Susaeta protestaba por la no señalización del saque de esquina o por un empujón sufrido. Sin embargo el Athletic, con las novedades más reseñables en el once inicial de la mano de la presencia de Iturraspe, Susaeta, Gabilondo y Amorebieta, ha optado hoy por el balón en largo, algo que esperaba también el rival y que pretendía contrarrestar con la presencia de Busquets como central. En el citado estado de cosas, la clave era llegar vivos, con opciones reales de puntuar, al final.

Y entre el intento de avasallar de unos y la necesidad de ir delante de otros, a falta de ocasiones claras, que ya llegarían, Koikili se ha llevado la primera tarjeta del partido y poco después Iraola, que supone la quinta de la presente Liga y que le obligará a parar ante el Valencia. De Marcos tiene serias opciones de ocupar su lugar. Los dos laterales amonestados y a seguir remando, porque al mínimo descuido los blaugranas son capaces de destrozar las más loables intenciones y en esas andaba Villa en el minuto 26 con una vaselina al larguero de la portería rojiblanca.

Alves también ha visto su quinta amarilla, mientras conforme se acercaba el intermedio el Athletic ha dado un paso adelante e incluso ha gozado de una diáfana ocasión de empatar la contienda antes del descanso, pero tras un perfecto centro de Gabilondo desde la izquierda, el testarazo de Llorente ha sido repelido por Pinto. Una pena porque, además del gol obtenido “de aquella manera”, el número de ocasiones de ambos equipos antes del descanso era similar, dos por bando, ya que en el minuto 43 de nuevo Villa ha enviado por encima del larguero.

Había partido y para afrontar la segunda mitad Caparrós ha retirado a Iturraspe e introducido a Toquero. El Barça quería salir mandón, pero el gol ha sido rojiblanco, muy pronto además. Llorente se ha adelantado a Busquets y éste le ha zancadilleado en el 49. Ha visto la cartulina amarilla, aunque si hubiera sido roja no habría pasado absolutamente nada. Por si existían dudas, durante el transcurso de la contienda el mismo Busquets ha hecho suficientes méritos para ver en total tres o cuatro cartulinas amarillas, pero la dificultad de arbitrar da paso a ese tipo de fenómenos paranormales, o no tanto.

Y mientras Pinto se afanaba en poner nervioso a Javi Martínez, éste le ha dado el balón a Iraola para que empatara desde los once metros y, de paso, diera inicio a otro partido en el que se han dado cita un equipo con casta y orgullo que quiere crecer y otro consolidado en la élite, pero que ha visto durante muchos pasajes del encuentro reflejado el pánico a no poder ganar, por mucho que lo más lógico sea que todos pierdan de vez en cuando, incluso en la segunda mejor Liga escocesa del mundo. Y en esa nueva dinámica, otra tarjeta discutida, la amarilla mostrada a Piqué por derribar a Toquero siendo el último de la fila.

Entre protestas Gabilondo le ha hecho trabajar a Pinto de lejano saque de falta y nuestro equipo estaba cada vez más a gusto en el campo del rival. Un reto apasionante a la par que peligroso, porque el Barcelona es mucho hueso en un cara a cara. Busquets lo ha recordado en el 56 al rematar alto de cabeza y entre idas y venidas el Athletic se multiplicaba para subir, bajar, robar balones, perderlos lo más tarde posible, tapar huecos, bascular, presionar, intentar llegar arriba y volver a empezar para ver si era verdad lo de la crisis del rival, mientras los locales buscaban y rebuscaban mientras la presión de la grada al colegiado iba in crescendo, sobre todo a raíz de una caída de Messi tras entrada de Javi Martínez en el minuto 60 tras un espectacular slalom del argentino. Ramírez Domínguez estaba bien colocado y ha hecho gestos ostensibles de que siguiera la jugada.

El nerviosismo se palpaba en el ambiente. Maxwell suplía a Mascherano cinco minutos más tarde, Busquets pasaba al centro del campo y Abidal al centro de la defensa. El Barça no bajaba el ritmo y poco a poco ha ido tensando la soga. Iraizoz ha dejado en nada un chut de Villa en el minuto 70, pero el pensamiento de nuestro equipo no era llegar al campo del líder para dejar buena imagen, sino para intentar llevarse los puntos y Muniain ha entrado por Gabilondo. Desgraciadamente, la presencia del recién incorporado no ha reducido el instinto asesino del lateral brasileño y en una de sus reiteradas incursiones el centro al corazón del área lo ha rematado Messi a la red en el minuto 77.

De ahí hasta el final, pese a que el Barça ha gozado de espacios, sinónimo de ocasiones, en las botas de Messi (buena parada de Iraizoz) e Iniesta, la tarea realizada por ambos bandos había sido ingente. En el nuestro David López sustituía a Susaeta, pasando Muniain a la derecha. No ha podido ser, y el Athletic cerraba la jornada dominical con cero puntos y una buena imagen, lo que parece haber servido de consuelo a los que tras la anterior derrota daban a entender que el equipo casi había tirado por tierra las opciones europeas, cuando en realidad lo más positivo sigue siendo que los rojiblancos son quintos pese a dos derrotas consecutivas. Para no irnos por las ramas, queda apuntado en el debe que con peores o mejores sensaciones, lo importante del trabajo semanal es ganar el partido de competición y pese a la buena imagen mostrada, sumar es imprescindible para seguir alimentando el sueño europeo en una recta final en la que cada punto se va a sudar sangre. Mientras llega el Valencia, quedémonos, a falta de puntos, como en el anuncio, con la idea que ver sufrir a los todopoderosos, aunque sea por un rato, no tiene precio.