Se sobrepone a las adversidades con una victoria justa y de gran valor ante el Deportivo Alavés que le aferra al cuarto puesto
El Athletic Club se aferra al cuarto puesto, aguantando el tirón que dio de víspera el Villarreal. Su victoria en el derbi ante el Deportivo Alavés con un autogol de Manu Sánchez en el minuto 71 le da una bocanada de oxígeno en la semana decisiva, con visitas a Getafe y Valencia. Ganó el que más propuso. Los de Coudet buscaron el punto y fueron incapaces de asomarse arriba por la gran labor defensiva rojiblanca.
Y es que el Alavés únicamente pegó un susto, en una de las primeras acciones del partido. Fue un barullo que no metió en la red Ander Guevara por la presencia de Simón. Hasta ahí, más allá de la intriga por el equilibrado primero y luego corto marcador, se asomó el equipo gasteiztarra.
Los leones, con una alineación plagada de jóvenes por las lesiones en el frente de ataque, mandaron durante todo el choque. El Alavés, un difícil visitante en números, las pasaba canutas para frenar a Maroan, víctima de demasiados agarrones. De Marcos habilitó al ariete en una jugada en la que el gasteiztarra se fue de Garcés y con todo a favor ante Sivera, cayó al suelo. Pareció penalti, pero no lo fue. Pisó a Garcés y no hizo pie.
Quitando una combinación entre Yuri y Djaló, un disparo de Jauregizar y dos centros intencionados de Olabarrieta, Sivera vivía relativamente tranquilo. Y así siguió pese los numerosos córners, rematados por los impecables Yeray y Vivian, hasta que Sancet entró al campo. Entre Galarreta y él tejieron la acción de gol, con Guruzeta, con muy buenos minutos, rematando y Manu Sánchez metiendo la pelota en propia meta. El resumen del partido, el Athletic empujando y el Alavés protegiéndose.
El Athletic tuvo la sentencia en un mano a mano de Maroan, habilitado por Guruzeta, en el que Sivera le robó el 2-0 con un gran brazo derecho. Ni siquiera hubo que sufrir porque el Athletic defendió el triunfo como un tesoro. Tarde redonda, con la Champions un poquito más cerca, aunque queda mucha tarea en estas tres jornadas, y homenaje previo merecidísimo al Bilbao Basket, campeón europeo.
