Atlético de Madrid - Athletic Club
Jornada 24
Liga

Atlético de Madrid - Athletic Club

Atlético de Madrid
Atlético de Madrid
12
Athletic Club
Athletic Club
  • 5' Antonio López
  • Susaeta 38'
  • Llorente 45'

UbicaciónVicente Calderón , Madrid

Atlético de Madrid 1-Athletic Club 2: Un paso adelante

El Athletic Club ha dado un importante paso adelante al derrotar 1-2 al Atlético de…

Athletic Club

El Athletic Club ha dado un importante paso adelante al derrotar 1-2 al Atlético de Madrid y gracias a los tres puntos la tranquilidad clasificatoria está más cerca. El gol local le ha sido concedido a Agüero, aunque ha parecido de Antonio López, y Susaeta y Llorente han sido los autores de los tantos de nuestro equipo, los tres goles durante el primer período del partido.

Un nuevo paso de los rojiblancos para poder crecer como equipo al ganar por vez primera en la presente Liga dos veces consecutivas, remontando un marcador adverso además y finalizando, de paso, con la racha negativa de bastantes temporadas sin ganar en el Vicente Calderón, tanto es así que sólo Etxeberria ‘sobrevivía’ de aquél equipo. Un poco al estilo de lo hecho en Valencia. También el entrenador ha dado por finalizada una racha negativa, ya que nunca había conseguido el triunfo con Medina Cantalejo como árbitro. Varias circunstancias y un hecho, el descenso está esta noche a cinco puntos de distancia y siguen siendo once los equipos implicados en la pelea.

A pesar de todo, la Liga no se para y después de superar a un rival que ha cerrado la jornada, a pesar de la derrota, en puestos de Champions League… llega a San Mamés el tercer clasificado, concretamente el Villarreal. Como siempre insistimos y sin perder la perspectiva, sirva el triunfo en un campo tan clásico como difícil para dignificar en la medida de lo posible lo hecho por nuestro equipo. No en vano escucharemos y leeremos, en nuestra propia casa y lejos de ella, que el triunfo es más o menos una graciosa concesión de un rival galáctico agobiado por infinidad de flaquezas. En su polo opuesto nos ocurrió tras un complicado partido ante el Levante y resulta que de los últimos cinco partidos de Liga el actual colista sólo ha perdido uno, contra el Athletic. Casualidad por supuesto.

El inicio del partido que cerraba la jornada no ha sido precisamente el soñado ante un rival que hace infinidad de destrozos al contragolpe. Para el minuto 5 la perspectiva era desoladora. Armando había desviado bien un disparo de Raúl García en el minuto 2, pero tres después una ley de la ventaja bien aplicada por el colegiado ha terminado con un centro desde la derecha del ataque del Atlético por parte de Antonio López, el mismo no ha sido ni rematado por Agüero, ni despejado por Iraola y, tras botar y coger velocidad, se ha introducido en la portería rojiblanca. El 1-0 ya era una realidad independientemente del cómo y del autor del gol.

Tranquilidad en las filas de los entrenados por Aguirre, prestos para jugar con espacios y locura en las gradas, sobre todo en el sector del megáfono que, con ventaja en el marcador, ha dedicado los siguientes minutos a insultar a diestro y siniestro, pocos se han salvado de la quema, siendo nuestro jugador Carlos Gurpegi objeto también de su creación literaria, como si no tuviera que soportar ya suficiente y sufriente calvario con la sanción administrativa.

El Athletic Club ha pasado unos minutos difíciles sin que su centro del campo contactara con la delantera y sin poder juntar las líneas para presionar las transiciones colchoneras. Ya en el minuto 14 Javi Martínez ha dado señales de vida, lo mejor estaba por venir, pero no ha llegado por muy poco al balón lanzado al área del tampoco muy apreciado por parte de su afición Abbiati.

En el minuto 28 un disparo de Llorente desde fuera del área ha sido desviado a corner por Abbiati y en el 29 Amorebieta ha rematado de cabeza por encima del larguero. Sin embargo, el peligro del Atlético estaba latente y en el 31 ha tomado forma tras una buena jugada colectiva rematada con el empeine de su pie izquierdo por parte de Luis García. El balón se ha estrellado en el larguero y Armando se ha llevado un susto por partida doble ya que ha sentido ciertas molestias que han obligado a calentar a Aranzubia durante bastantes minutos de la segunda mitad.

Todo seguía cuesta arriba, pero el Athletic ha sido capaz de dejar el partido encarrilado antes del descanso. En el minuto 33 Yeste no ha encontrado a Llorente por centímetros en un lanzamiento frontal de falta y el balón lo ha recogido Abbiati. En el minuto 39 hemos vivido la jugada del partido. Una falta lanzada al área por el Atlético de Madrid ha sido interceptada en el punto de penalti por Javi Martínez quien, ni corto ni perezoso, ha emprendido un vertiginoso slalom con controles de izquierda y derecha entre jugadores locales para ceder el balón a Susaeta quien, con la sangre fría suficiente, ha establecido el empate por el popularmente denominado palo corto. Cuarto gol en Liga.

Recompensa por partida doble. Por un lado teniendo en cuenta la entidad de la jugada y, por otro, para demostrar que a todos los equipos, como le ocurriera al nuestro hace un par de jornadas en Zaragoza, les hacen goles de parecida factura cuando no ejecutan con la precisión necesaria una jugada de estrategia en ataque.

El Atlético, es evidente, no contemplaba ese escenario y los de Aguirre no han sido capaces de crear ningún peligro hasta el descanso. El Athletic, en cambio, ha conseguido rentabilizar al máximo sus ganas de remontar. No ha dado un paso atrás y lo ha seguido intentado. En esta ocasión ha logrado marcar en el descuento tras una falta ejecutada de nuevo por Yeste y un remate con la espuela de Llorente, quien ha partido emparejado a su defensor con una diferencia de centímetros que haría bizantino cualquier debate en torno a su posición legal o ilegal. Quinto gol en Liga.

Alegría en el intermedio, pero conscientes de que los partidos son muy largos en todos los campos y más en los de rivales de cierta enjundia. Al menos Raúl García ha aligerado en cierta medida el camino al ver su segunda cartulina amarilla en el minuto 51, si bien nuestro equipo ha sabido gestionar con tino la situación ulterior y los colchoneros han visto multiplicada su dificultad de crear peligro.

Aguirre ha decidido centrar algo más a Maxi y ha dejado las sustituciones para más adelante. El Athletic ha tenido entonces su primera tanda de opciones para sentenciar el encuentro. Yeste ha rematado desde el borde del área en el minuto 56, pero su chut se ha estrellado contra un defensa. En el centro posterior Antonio López ha agarrado a Aduriz, o al menos así lo ha reclamado el delantero. En el 57, finalmente, el propio Aduriz ha rematado raso fuera.

El Athletic Club comenzaba la presión desde muy arriba y robaba bastantes balones, acrecentando el nerviosismo en las filas locales y la impaciencia en la grada. Un disparo fuera de Forlán desde el exterior del área en el minuto 59 es el único apunte de peligro tras la reanudación. Un minuto después una agresión limpia de polvo y paja, en forma de codazo en el rostro de Pablo a Aduriz cuando éste acudía a rematar, no ha tenido reflejo al estar el asistente atento al esférico y no haber sido percibida por el colegiado. De penalti y expulsión se ha pasado a seguir peleando por mantener la ventaja.
Todo ello, así es el fútbol, entre protestas del público por la actuación arbitral.

Finalmente en el minuto 68 el técnico local se ha decidido a intentar cambiar algo y ha dado entrada a De las Cuevas en lugar del central Eller, pasando a colocarse en un 3-4-2 que le ha dado el control y la iniciativa durante algunos minutos, también exentos de peligro si exceptuamos un disparo de Maxi detenido por Armando en el minuto 69. De ahí a la segunda tanda de opciones de los ayer hombres de negro, que ayer no dieron apenas opciones a levantarse a su rival, uno de los males de nuestro Athletic en otros encuentros.

Así las cosas, en el minuto 70 Susaeta ha culminado una buena jugada individual con uno de los denominados “pase de la muerte” a Yeste, quien al entender que no tenía ángulo para el chut ha cedido a Aduriz, de cara, con tal mala fortuna que su disparo ha sido repelido por el rostro de Pernía. A la salida del saque de esquina Aduriz ha rematado picado de cabeza, peor Abbiati ha vuelto a ceder saque de esquina. En esos momentos sería de imbéciles negar que ha pasado por la cabeza la idea de que quien perdona lo termina pagando en forma de gol en sus propias carnes.

Para ayudar a evitarlo Etxeberria ha vuelto a los terrenos de juego en el minuto 75 en lugar de Aduriz. Los minutos se han ido consumiendo con dos sobresaltos por parte de un rival que sólo parecía ser capaz de hacer daño en jugadas de estrategia. En el primero Luis García ha pedido penalti en el 81, pero el árbitro, bien colocado, no lo ha considerado así. En el segundo una chilena de Kun Agüero la ha desviado Armando a corner. Tras su saque Antonio López ha arrollado literalmente a Amorebieta cogiendo un sinfín de papeletas para otra cartulina roja o amarilla, que en su caso habría sido la segunda. Parecía demasiado trajín para una misma noche.

Para matar el tiempo Ustaritz y Gabilondo han reemplazado a Orbaiz y Susaeta y el partido ha terminado con bien. Segundo triunfo consecutivo y dos puntos más que en la primera vuelta contra los mismos rivales. Una racha positiva que sería más que interesante refrendar el domingo ante el Villarreal. Cómo cambian las cosas en una semana. Ahora al menos toca disfrutar, con los pies en el suelo, pero disfrutar.