RC Celta - Athletic Club
Jornada 26
Liga

RC Celta - Athletic Club

RC Celta
RC Celta
11
Athletic Club
Athletic Club
  • 35' Ángel
  • Aduriz 69'

UbicaciónBalaídos , Vigo

Celta 1 Athletic Club 1: Un poco de todo

El Athletic Club ha conseguido empatar a un gol ante el Celta de Vigo en…

Athletic Club

El Athletic Club ha conseguido empatar a un gol ante el Celta de Vigo en un partido que ha tenido de todo: un buen comienzo, un flojo juego después, el gol local en la primera aproximación, un comienzo gris de la segunda mitad y una mejoría hasta el final con un balón al palo de la meta rival en el minuto 94 y, por encima de todo, un diez para los miles de aficionados de nuestro equipo que se han desplazado a Vigo y han demostrado las ventajas de tener, posiblemente, como rezaba el anuncio, la mejor afición del mundo.

Los goles han sido obra de Angel en el minuto 36 y de Aduriz en el minuto 70. Faltan doce jornadas para la conclusión de la Liga, poco menos de un tercio de la misma y el Athletic sigue a una victoria de poder abandonar los puestos de descenso con una lucha muy cerrada por delante, que no será cosa de dos o tres semanas. Con la vista puesta en el calendario, serán claves los siete partidos a disputarse en San Mamés y por si acaso el equipo ha retomado la costumbre de puntuar lejos de la Catedral.

En Balaidos, como no podía ser menos, tocaba un partido de poco juego y mucha tensión y el Athletic lo ha encarado bien, con un esperanzador inicio en el que los rojiblancos llevaban la iniciativa y mantenían al Celta alejado de las proximidades de Aranzubia. La primera ocasión, que a la postre sería la única de todo el primer tiempo, ha sido para Sarriegi al rematar fuera de cabeza en el minuto 3 un saque de esquina. La tendencia se ha mantenido hasta el minuto veinte aproximadamente y a partir de ahí el partido ha sido dominado por el Celta, con la salvedad de que no creaba ocasiones claras de gol, si bien el Athletic tenía verdaderas dificultades para acceder al campo rival con el esférico controlado.

Sin embargo, a los equipos que marchan abajo no hace falta hacerles infinidad de ocasiones para marcar y el Celta lo ha logrado a la primera. Un saque de esquina en corto y el posterior centro de Aspas al área ha sido cabeceado en el segundo palo por Baiano hacia el centro del área chica, donde Ángel ha rematado de cabeza sin apenas oposición. Al poco tiempo Canobbio ha hecho trabajar a Aranzubia mientras el Athletic seguía sin dar síntomas de reacción y así se ha marchado al vestuario.

Sin variar el dibujo 4-2-3-1 de la primera parte Gabilondo ha reemplazado a Dañobeitia, colocándose Yeste en la banda derecha del ataque. De primeras el panorama no ha cambiado y el Celta ha tenido sus minutos de oro para desequilibrar la contienda y empeorar aún más el panorama. Los celestes eran más peligrosos con espacios y en cuatro minutos han tenido otras tantas opciones de gol. En el minuto 55 Baiano ha disparado, el balón ha rebotado en su defensa y casi se cuela. En el 56 Yago ha rematado fuera de cabeza un corner. En el 57 la opción ha sido para Cannobio, pero se ha topado con Aranzubia y en el 58 Baiano se ha llenado de balón al empalmar una bolea con la izquierda.

Mane ha introducido a Aduriz en lugar de Urzaiz en el minuto 60. El cambio ha ido acompañado con el movimiento de Javi Martínez a la banda derecha y el de Yeste a la media punta. El otro cambio, más trascendental, ha sido para el Celta el quedarse con diez jugadores al ver Pablo García tarjeta roja por agarrar a Aduriz del cuello. Cartulina roja merecida, amén de que cuando García entra en escena la fiesta de las tarjetas no está lejos, ni en el espacio, ni en el tiempo. A pesar de los pesares, han pasado varios minutos hasta que el Athletic ha cogido definitivamente las riendas del partido. Javi Martínez ha realizado el primer disparo entre los tres palos, de volea y en el minuto 69, si bien uno más tarde la estrategia, ya era hora, ha dado sus frutos con un lanzamiento de falta de Yeste que Aduriz ha peinado de cabeza a la red.

Empezaba un nuevo duelo. El Celta ha introducido a Bamogo por Baiano buscando más frescura en sus salidas a la contra, aunque su siguiente opción ha sido un cabezazo de Lequi a las manos de Aranzubia. Nuestros jugadores han ido aprovechando paulatinamente su superioridad en la medular y han comenzado a acercarse a las inmediaciones de Pinto con algo más de asiduidad. En el 76 Amorebieta ha rematado fuera y en el minuto 78 un centro de Gabilondo ha sido rematado por Aduriz, pero ha atrapado Pinto. A Gabilondo le han hecho penalti en una pared con Yeste, pero el peligro con mayúsculas ha sido celtiña. Vázquez ha introducido a Nené en el minuto 80 por Núñez. Aun estando en superioridad numérica el Athletic ha visto, en el minuto 83, como el recién incorporado se colaba en el área y encaraba a Aranzubia, si bien el meta ha conseguido despejar con el pie. Hubiera sido demasiado castigo para como estaba la contienda y, al mismo tiempo, era reflejo del descontrol instalado en Balaidos. Vila ha suplido enseguida a Gustavo López y Llorente ha tenido que hacer lo propio con el recién incorporado Aduriz en el minuto 88, al sufrir éste un fuerte golpe en su cuádriceps izquierdo.

El Athletic iba a por el partido. Así las cosas Gabilondo ha hecho trabajar a Pinto en el minuto 90 y al término de los cuatro de prolongación un lanzamiento de falta de Yeste ha sido rematado en plancha por Sarriegi con tan mala fortuna que el balón se ha estrellado contra el poste. Decir que el Athletic Club pudo ganar, pero también perder en otras fases del partido, resumiría lo visto en Vigo y por lo tanto la igualada no es mala, pero deberá ser ineludiblemente ratificada el sábado en San Mamés frente a Osasuna con un público que, de nuevo, responderá a la perfección, de eso no existe duda alguna.
Para ese partido Aduriz es duda por su lesión y Murillo es baja al haberle enseñado el colegiado su quinta cartulina amarilla. Hasta ahí todo correcto, si no fuera porque según muestra el acta, se la ha enseñado por pérdida de tiempo… en el minuto 66 cuando el Athletic perdía 1-0. Vivir para ver.