Real Madrid - Athletic Club
Jornada 8
Liga

Real Madrid - Athletic Club

Real Madrid
Real Madrid
32
Athletic Club
Athletic Club
  • 12' Sneijder
  • 29'59' Higuain
  • Etxeberria 35'
  • Iraola (p.) 44'

UbicaciónSantiago Bernabéu , Madrid

Real Madrid 3-Athletic Club 2: Buen trabajo y poco premio

El Athletic Club ha perdido 3-2 en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid. Etxeberria…

Athletic Club

El Athletic Club ha perdido 3-2 en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid. Etxeberria e Iraola, de penalti, han logrado los goles de nuestro equipo y Sneijder e Higuain (2) los del conjunto local. Al fin y al cabo se ha cumplido el comentario generalizado durante la semana: tiene que salir un partido redondo en todos los aspectos para puntuar y se han acumulado demasiados factores, propios y ajenos, para que así no sucediera. Además, por si la derrota y la difícil situación clasificatoria no fueran suficiente castigo, y una vez visto el desarrollo del partido, en el que ha habido para todos, hay que oír que los árbitros están embarcados en una supuesta cruzada para perjudicar al Real Madrid. En fin.

El duelo ha empezado según el guión imaginado de antemano. El Real Madrid queriendo hacer daño con su 4-3-3 sin patrón establecido y con constantes cambios de posición del medio del campo hacia arriba. El Athletic Club bien puesto atrás con un claro 4-4-2 y atisbos de presión a la salida del balón rival.

Desgraciadamente, los blancos se han percatado demasiado pronto que el centro de la retaguardia era lo más vulnerable. Para empezar Sneijder ha lanzado un globo sonda desde su campo a los dos minutos, pero el peligro real venía cuando el mencionado desde la parte izquierda e Higuain desde la derecha ganaban la espalda de los centrales. AL séptimo minuto el banderín del asistente ha invalidado por fuera de juego que no existía un gol de Higuain, aunque había pitado antes de rematar, pero no ha sonreído la misma fortuna en el minuto 12 al quedarse “enganchado” Balenziaga y aprovechar la opción Sneijder para establecer el 1-0.

Como tantas y tantas veces, con el mínimo esfuerzo el Real Madrid obtenía ventaja mientras nuestro equipo llegaba y llegaba por ambas bandas sin rédito alguno al no atinar en el último pase. Así las cosas, el partido ha entrado en un toma y daca. En el minuto 17 Llorente ha rematado de cabeza un córner pero bajo palos entre Casillas y Marcelo han despejado el balón. Al minuto siguiente Sneijder ha lanzado al poste, en el 19 Etxeberria ha rematado con la zurda fuera por muy poco y en el 20 Casillas ha abortado una jugada individual de Gabilondo.

El nerviosismo iba in crescendo en las gradas del Bernabéu, pero Higuain era el único que seguía impasible su ritmo. En el 27 ha intentado sin éxito una vaselina y en el 28 ha visto de nuevo la misma alfombra roja y ha marcado con relativa facilidad el 2-0. Hasta la fecha la capacidad de reacción no era uno de los fuertes de nuestro equipo. Sin embargo, pese a la mala racha de resultados que arrastra, ha sabido seguir con la cabeza alta, algo que dice mucho a su favor, no ha cejado en su empeño y al descanso se ha retirado con la contienda igualada a dos goles. De hecho el Real Madrid ha desaparecido en ataque hasta el intermedio. Para empezar Etxeberria ha terminado con la sequía goleadora que arrastraba el equipo al recibir un pase “rebañado” de Yeste y elevar el balón ante la salida de Casillas.
Era el minuto 34 y quedaba tiempo para intentar la voltereta. Gabilondo, desde lejos, ha enviado a las manos de Casillas en el 41 y a punto de cumplirse el minuto 45 Heinze ha repetido con Llorente y, como hiciera la temporada pasada, la mano en su rostro ha desembocado en penalti transformado por Iraola pese a las protestas y triquiñuelas locales antes del lanzamiento. Y al contrario de lo que sucede en las historietas de Bugs Bunny, eso no era todo amigos. Marcelo, no conforme con intentar despistar a Iraola antes de marcar, ha cortado con falta a la altura de la rodilla un contragolpe de Etxeberria, pero la tensión era ya tal en el Bernabéu que todo ha quedado en una amarilla. Para ser una campaña orquestada no estaba nada mal.

Sin cambios para comenzar la segunda mitad. Buena predisposición del Athletic, dispuesto a llevar la manija del duelo, pero el conseguir esa faena redonda en el Bernabéu no es tarea fácil. Sin hacer nada del otro jueves, un par de chispazos de su innegable calidad le han servido al cuadro anfitrión para subirse de nuevo a la cresta de la ola buena. Parecía que no estaba en el campo, pero un par de regates de Robben y un control largo rematado según le venía por Higuain y desviado al larguero por Iraizoz han servido para inclinar el campo. Y más aún cuando tras el saque de un córner un rebote absurdo le ha caído a Heinze y éste ha chutado de nuevo contra la madera. Se han crecido los blancos y Robben le ha dado trabajo a Iraizoz en el minuto 55.

Garmendia ha suplido a Joseba Etxeberria y en el minuto 57 ha pasado al corazón del área para que Gabilondo rematara fuera por poco con su pierna derecha. Y así seguía nuestro equipo, camino del partido redondo cuando en el camino a Yeste se le ha perdido un balón que Gago ha conducido raudo hasta Higuain y éste, por la mitad del medio, se ha plantado ante Iraizoz y le ha batido sin remisión. Vuelta a empezar.

La película no era desconocida. El Real Madrid quería tener balón y Guti ha entrado por Van der Vaart, mientras que a Salgado le mostraban la tarjeta amarilla en el minuto 65. Gabilondo, mientras tanto, era en el 68 el protagonista de la primer opción de peligro post-gol, pero era el Real Madrid el que disfrutaba en la dinámica creada, de ida y vuelta y rival abierto, su escenario favorito. En esa pelea Robben ha lanzado alto y Sneijder le ha dado trabajo a Iraizoz.
Para el Athletic se iniciaba un cara o cruz y en cinco minutos ha pagado la bronca previa al tiempo de descanso. Cruz, por supuesto. En el minuto 73 una zancadilla de Salgado a Yeste se ha saldado con una mini-tángana y una segunda cartulina amarilla de manual durmiendo el sueño de los justos. En cambio la entrada de Amorebieta a Higuain en el minuto 77 ha terminado con el central camino de la ducha y con descanso obligado frente al Recreativo de Huelva. Para intentar apuntalar la contención blanca Diarra ha entrado por Sneijder.

Quedaba un cuarto de hora y el Athletic ha seguido sin arrojar la toalla y ha tratado de tú a tú a un rival técnicamente superior, con todo lo que ello implica a la hora de jugar en inferioridad. Caparrós ha introducido a Casas y Susaeta en lugar de Gabilondo y Yeste. En un escenario aún más idílico Higuain, quién si no, ha gozado de la ocasión más clara, pero su cabezazo se ha marchado rozando el palo. Más cerca, en la misma madera, ha terminado un tremendo derechazo de Llorente desde fuera del área en el minuto 87 y en plena agonía el mismo jugador ha pedido penalti en el 88, pero la fortuna no iba a sonreír ni siquiera a última hora.
Para terminar, Schuster, además de las nuevas lecciones de su tratado de fair-play y buenas costumbres ofrecidas tras el 3-2, ha introducido a Saviola por Raúl y el partido ha terminado sin botín de puntos, segunda jornada en la que sólo hay que quedarse con ciertas dosis de buenas sensaciones. De la mano de las mencionadas vibraciones positivas debe retomar el Athletic el camino de la suma en San Mamés y, paralelamente, recuperar también esa solidez defensiva de la pasada campaña porque sólo desde un bloque fuerte y cohesionado en todas sus líneas se encontrará la salida.