Athletic Club - RC Deportivo
Jornada 31
Liga

Athletic Club - RC Deportivo

Athletic Club
Athletic Club
01
RC Deportivo
RC Deportivo
  • Pablo Álvarez 86'

UbicaciónSan Mamés , Bilbo

Tropiezo injusto

Al Athletic se le escurrió ayer entre las manos un partido importante para el futuro…

Athletic Club

Al Athletic se le escurrió ayer entre las manos un partido importante para el futuro de sus opciones de cara a alcanzar la tan soñada tranquilidad liguera, de forma inverosímil. La pérdida de, al menos uno de los tres puntos en juego, acaeció tras una jugada de inmensa fortuna, calificada por los propios protagonistas triunfantes en la lid, de suceso esporádico y en absoluto acorde con lo presenciado en San Mamés.

Tras un inicio ciertamente dubitativo por parte de ambas escuadras, y con poco fútbol y muchas ganas, Athletic y Depor comenzaron muy, muy pronto, a visualizar que el choque iba a resultar una pelea cuerpo a cuerpo, en la que un arranque genial, una acción talentosa, o un golpe de suerte, iba a decantar el devenir de la cita.

Bien es cierto, que el conjunto gallego poco trabajo ofertó a un Iraizoz que resolvió con suficiencia la tarde, accidente final al margen. Tan verídico como que los hombres de Miguel Angel Lotina controlaron un primer acto en el que se sintieron a gusto con el marcador y también con el estado de las cosas.

El Athletic amagó, mas no pudo adelantarse en el luminoso, por mor de una jugada en la que una meritoria aproximación de Llorente, conducida con esmero por David López, y rematada finalmente por Iraola, resultó abortada en el camino emprendido por el esférico hacia la red, por un defensor coruñés. Tocaba sufrir.

Se prolongó durante unos minutos el esperado inicio de la segunda mitad. Un problema detectado por el asistente en la portería de ingenieros dilató la reanudación. Y bien, el equipo rojiblanco no fue un huracán, pero salió a solventar la coyuntura. Si no tormenta, fue vendaval, e insufló de paso aire a la grada. Llorente, Yeste, Orbaiz y Toquero, sumamente activo durante los casi noventa minutos en los que actuó, pusieron a un seguro Aranzubia a prueba.

Así las cosas, los leones tomaron definitivamente las riendas del partido, aún siempre con la espada de Damocles de una letal contra deportivista en el horizonte. O de una brizna de mala suerte. Y en una acción un tanto confusa, por la situación de los ejecutores blanquiazules en lo concerniente al fuera de juego, acabó con un disparo de Pablo Alvarez que tropezó en Koikili y llevó la pelota a las mallas de Iraizoz. Ver para creer.

Son 34 puntos en el casillero. Ni más, ni tampoco menos. Suele comentarse que es más apropiado para los profesionales disputar lo antes posible el siguiente envite, mantener la tensión que lleva aparejada la competición y pensar que está cercana una nueva oportunidad para poder resarcirse de la derrota. El equipo puede. Y tiene ante sí la opción de alejarse del pozo de serpientes en Soria.