Atlético de Madrid - Athletic Club
Jornada 18
Liga

Atlético de Madrid - Athletic Club

Atlético de Madrid
Atlético de Madrid
23
Athletic Club
Athletic Club
  • 16' Ion Vélez (p.p.)
  • 92' Forlán
  • Koikili 45'
  • Llorente 49'66'

UbicaciónVicente Calderón , Madrid

Victoria en el Calderón

El Athletic Club se ha impuesto por 2-3 al Atlético de Madrid. Los goles del…

Athletic Club

El Athletic Club se ha impuesto por 2-3 al Atlético de Madrid. Los goles del Athletic han sido obra de Llorente 2 y de Koikili. Por el Atlético de Madrid han marcado Antonio López y Diego Forlán.

Nítido y merecido triunfo el conseguido por nuestro equipo en un campo siempre difícil. La superioridad rojiblanca ha sido total en los noventa minutos de partido y, como en los dos anteriores disputados en 2009, el Athletic ha sabido reaccionar positivamente ante un marcador en contra, en este caso hasta conseguir darle la vuelta. Podemos decir que el 2-3 no refleja la diferencia entre ambos equipos, pero al fin y a la postre el premio es idéntico. Con los tres puntos de hoy, además de seguir con la buena racha de partidos consecutivos sin perder (seis de Liga y uno de Copa) nuestro equipo se sitúa en la zona media de la tabla, con el descenso más lejos que la semana anterior y con más equipos entre medio. El objetivo inmediato, superados los puntos de la pasada campaña a estas alturas, sería derrotar al Valencia el domingo en San Mamés, pero entre semana el Athletic Club tiene una cita si cabe más importante y que entre todos hemos de convertir en realidad: clasificarse para los cuartos de final de Copa. Lo peor de la victoria en el Calderón ha sido la quinta amarilla vista por Amorebieta, que le impedirá estar ante el Valencia, y los golpes recibidos por David López e Iraizoz.

El partido empezó entre bolas de nieve contra Iraizoz, ya desde el calentamiento con intención de enfriarlo, y acabó con la grada local congelada. Sin embargo, los responsables de que nuestro guardameta no fuera un muñeco de pim-pam-pum reaccionaron muchísimo más tarde de lo debido. Prueba de su falta de diligencia fue que el colegiado de la contienda optó, primero, por retrasar el comienzo del partido y, posteriormente, por pararlo en el minuto 5:22 de juego, ya que la integridad de los protagonistas, sobre todo la de Iraizoz, corría peligro.

Cuando el encuentro se ha reanudado el panorama no ha sido muy distinto al que mostraba un Athletic sólido, con las tareas preconcebidas desde la presión a la hora de que los colchoneros sacaran jugado el balón. La verdad es que se puede decir que los anfitriones no han podido gozar en ningún momento de tranquilidad para combinar. Al robar el balón muy arriba, el Athletic llegaba con relativa facilidad a las inmediaciones del área rival. De hecho Leo Franco ha intervenido en el minuto 7 a tiro de Orbaiz y Koikili ha enviado alto en el minuto 13. Desgraciadamente la falta de noticias sobre el Atlético no ha escondido su conocida efectividad y en el minuto 16 Antonio López ha recibido un saque de esquina, ha recortado al borde del área y, con su pierna menos buena, ha disparado con la mala suerte para nuestros intereses de que el balón ha entrado por la escuadra, tras tropezar en Ion Vélez.

El choque no ha cambiado, simplemente porque el Athletic no se ha inmutado y ha decidido seguir a lo suyo. No han descendido ni la intensidad, ni el ritmo, ni la determinación con la que se había afrontado la contienda. Ha sido un ejercicio de confianza en las posibilidades propias. Así Ion Vélez ha rematado fuera de espuela un minuto más tarde, en el 20 Llorente se ha internado en el área pero en el uno contra uno ha triunfado Leo Franco, Koikili ya iba avisando y desde lejos ha disparado fuera en el minuto 24, a David López le ha pillado el toro en el punto de penalti a la media hora y en el centro posterior de Susaeta Llorente no ha podido rematar de cabeza.

Los aficionados locales veían entre gestos palpables de desaprobación la incapacidad de los suyos para crear peligro y en la segunda parte han pedido incluso la marcha de su entrenador. El Athletic insistía en mostrar buen juego y escasa puntería, como Llorente en el cogollo del área en el minuto 37 tras cabalgada de Ion Vélez y ulterior robo de balón, no exento de calidad, a Ujfalusi. Ni con esas. Vuelta a insistir y en los dos minutos de nevada prolongación Koikili ha pensado que a la tercera sería la vencida y ha disparado duro desde fuera del área para batir a Leo Franco. El empate era escaso premio al trabajo de unos y otros, pero era un empujón moral de dimensiones incalculables y la historia de la pasada Liga se repetía con similar guión e idéntico desenlace.

En la caseta se quedaba Seitaridis, entraba Pernía y Antonio López se colocaba en banda derecha. El panorama era el mismo y tras una jugada en la que Kun Agüero ha reclamado un penalti que parecía no existir, la mala fortuna del 1-0 se ha tornado buena en la jugada del 1-2. Llorente ha robado el balón a Ujfalusi en la línea medular y se ha dirigido hacia el área, una vez allí ha disparado con la zurda y el balón, tras tocar en Domínguez, se ha introducido en la red. Al Athletic Club la verdad es que le ha dado lo mismo, porque no ha cambiado ni un ápice su forma de jugar. De hecho sólo cinco minutos después a Ion Vélez le han anulado un tanto por fuera de juego tras peinar Javi Martínez un saque de esquina.

En el bando contrario el único acopio que hacían los de Aguirre era el de tarjetas, quizá menos de las merecidas y en algunos casos de distinto color. En una de éstas David López ha terminado lesionado, siendo posteriormente sustituido por Gabilondo. Aguirre ha intentado reforzar su perdida medular con la entrada de Banega en lugar de Domínguez retrasando a Camacho al centro de la zaga. En su nueva ubicación el colegiado le ha perdonado la segunda amarilla.
En esa dinámica inalterable el recién entrado Gabilondo le ha hecho un túnel a un rival y se ha marchado hacia el área para poner un centro preciso que Llorente ha convertido en su octavo gol en la presente Liga.

La capacidad de reacción local era cada vez más escasa. Kun Agüero ha rematado fuera por poco en el 68, poco antes de que Toquero entrara por Vélez y Sinama por Maxi. Por si el destino del partido no estaba diseñado de antemano, Maniche se ha ganado la roja a pulso en el minuto 72. Lo que les faltaba. En el 78 Caparrós ha introducido en el lugar de Susaeta a Etxeberria, quien ha jugado como segundo punta pasando Toquero a la banda diestra.

En medio de esa sensación de estar todo resuelto Kun Agüero, queremos creer que abducido por la impotencia reinante en sus filas, ha pisado sin balón de por medio, y sin sanción, a Javi Martínez cuando éste estaba en el césped caído.

Curiosamente, cuando mejor lo tenían nuestros jugadores ha sido cuando peor han leído el partido y les ha faltado aplomo para mover el balón de un lado al otro y terminar así de desquiciar al rival. Un equipo que si algo tiene es calidad individual arriba y en la prolongación entre Kun y Forlán, con algún rebote afortunado también de por medio, han fabricado el 2-3. Un espejismo, pero que otorga los mismos puntos que cualquier otro triunfo por más goles. Y es que de eso se trataba, se seguir sumando muescas en la racha de partidos consecutivos puntuando (seis en Liga y un empate en Copa) y nada mejor que hacerlo con la segunda victoria fuera de casa y de la mano del juego y la garra exigibles para la ocasión, porque cada partido no deja de ser una historia bien distinta y este fin de semana, además, la nieve ha sido la artista invitada al fútbol y a lo que le rodea. Que siga la racha en Copa.