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Athletic Club - FC Barcelona
- 88' Aduriz
UbicaciónSan Mamés , Bilbao
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Aduriz tumba al Barça con un gran gol
El ariete, con una impresionante volea en el 88’, engrandece su leyenda
Aritz Aduriz es eterno. Ha sido anunciar que dejará el fútbol al final de la próxima temporada y hacer su último gran servicio al Athletic Club. Una enorme volea del goleador a centro de Capa ha derrotado al Barça en el estreno liguero y enardecido a un San Mamés extasiado. Gloria al ariete, al que bastó un minuto sobre el campo para dejar un gol para la historia. Su último clásico liguero en San Mamés jamás se olvidará. Su escorzo no fue de un jugador de 38 años, le pegó con aire juvenil.
Fue el triunfo de la fe hasta el final. Con el último resuello en la boca, el Athletic dio un paso adelante y ganó. Fue un centro infatigable de Capa, que encontró a Aduriz en su hábitat natural.
El equipo de Gaizka Garitano salió mandando en el partido y disfrutaron de las dos primeras ocasiones en las botas de Iñaki Williams, en un disparo de larga distancia y en un contragolpe. Ter Stegen abortó ambas con brillantez.
El Athletic sometía al Barça, que no estaba cómodo sobre el verde. Sin embargo, una cesión de Unai López dejó solo a Suárez ante Simón. El uruguayo estuvo a punto de meter ‘el gol del cojo’, ya que llevaba minutos lesionado. Su zurdazo tropezó en la madera. Rafinha entró en su lugar.
Era un partido sin grandes ocasiones. Capa encontró en un eslalon un buen pase atrás a Raúl García, pero el tiro forzado de éste fue a las manos de Ter Stegen. El Barça, con esos chispazos a los que acostumbra, estuvo a punto de marcar al filo del descanso. Rafinha mandó la pelota cerca del ángulo, pero Simón desvió lo justo al larguero.
El meta andaría también atento en la primera ocasión tras el descanso, en un zurdazo de Rafinha. El Barça empezó a mandar y Rakitic mandó arriba una clara ocasión justo después de que debutase Sancet. Todo apuntaba al empate sin goles ante los de Valverde cuando apareció Aduriz, el que metió cuatro goles en la Supercopa al Barça en el último título. Una bendición.